Los terapeutas intentan ayudar realizando diferentes terapias con sus pacientes. Dependiendo del problema que
tienen que lidiar usan diferentes métodos para mejorar las vidas de sus
clientes. Aunque en ocasiones hay psicólogos que se toman demasiado en serio su
trabajo y se involucran demasiados con sus pacientes. Hoy haremos terapia con
una psicóloga que se toma demasiado en serio su trabajo.
La serie “Gypsy” de la cadena
Netflix nos muestra a una morbosa terapeuta interactuando con las personas que
forman parte de la vida de sus pacientes. Los personajes son muy curiosos, Jean
Holloway (Naomi Watts) es una obsesiva y morbosa terapeuta que rompe los
límites profesionales cuando empieza a relacionarse de manera peligrosa con las
personas cercanas a sus pacientes, Michael Holloway (Billy Cudrup) es un ambiguo
abogado que se cuestiona su ética profesional además de ser el encantador marido
de Jean.
Sidney Pierce (Sophie Cookson) es
una manipuladora y atractiva barista que trabaja en una lujosa cafetería y toca
en un grupo de música, Sam Duffy (Karl Glusman) es una deprimido e inmaduro
paciente de Jean que no ha superado su ruptura con Sidney, Larin Inamdar
(Poorna Jagannathan) es la mejor amiga de Jean y una terapeuta poco
convencional con un extraño sentido del humor, Claire Rogers (Brenda Vaccaro)
es una adinerada y neurótica paciente de Jean que está obsesionada en controlar
la vida de su hija.
Rebecca Rogers (Brooke Bloom) es
la inteligente y rebelde hija de Claire que ha rechazado un futuro prometedor
para disfrutar del presente, Alexis (Melanie Liburd) es la ambiciosa e
irresistible secretaria de Michael además de llevarse fatal con Jean, Allison
Adams (Lucy Boynton) es una seria y nerviosa paciente de Jean que dejó sus
estudios por culpa de las drogas, Holly Faitelson (Kimberly Quinn) es una
divertida e imprevisible amiga de Jean que no para de hablar de viajes
vacacionales y repostería.
La serie ha conseguido tanto malísimas críticas
como buenísimas. Lo más criticado de la serie ha sido su guión al que le han
faltado los ingredientes básicos de un buen thriller, drama, suspense y erotismo.
También ha sido desastroso el final que ha resultado ser demasiado rápido y
desagradable. En cambio hay que destacar el gran trabajo de Naomi Watts que ha
demostrado que puede llevar perfectamente el peso de una serie a sus espaldas.
Netflix no ha anunciado sí va a renovar o no la serie pero todo hace indicar
que no lo hará.
Para despedirme os dejaré esta
pregunta ¿Alguna vez habéis necesitado ayuda de un terapeuta?
Raúl.
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